No me gusta ninguna de las tres novedades que la UEFA ha introducido de cara a la nueva edición de la Liga de Campeones que arrancará el próximo mes de septiembre. Es más, pienso que dos de las novedades desvirtúan la competición y le restan atractivo y competitividad. Vayamos por partes.

Fuera las prórrogas

La primera gran novedad es la eliminación de las prórrogas. A partir de ahora un empate durante los ciento ochenta minutos de rigor se resolverá directamente desde el punto de penalti. La prolongación, que ha dejado momentos memorables en la historia del fútbol y de la Copa de Europa, pasará a la historia. Decir que con ello se busca disminuir la carga de minutos de los jugadores es una excusa peregrina que carece de sentido desde el momento en que el máximo organismo europeo ha aumentado la primera fase a ocho partidos en vez de seis, y se ha inventado una repesca.

Factor cancha en base a la liguilla

La otra gran novedad es que los ocho primeros clasificados en la liguilla tendrán siempre ventaja de campo mientras sigan en competición y, en caso de ser eliminados, su verdugo les robará ese privilegio. Es decir, jugarán siempre la vuelta en casa. La clasificación no refleja el verdadero nivel de los primeros clasificados por la sencilla razón de que se trata de una liga en la que no todos juegan contra todos. Puede ser, por poner un ejemplo, que el que quede primero haya tenido un calendario mucho más amable que el tercero, habiéndose enfrentado a equipos de menor nivel. Se trata, por lo tanto, de una ventaja tremendamente importante que no refleja la realidad de la competición.

La final, de día

La tercera novedad es que la final se jugará a las 18.00 horas en lugar de a las 21.00 horas, para favorecer a los espectadores de otras latitudes. El partido más importante del año a nivel de clubes pasará desde el año que viene a jugarse con luz natural. Me parece la menos relevante de las novedades, aunque se trata de una decisión que resta cierto encanto al evento  y hace que los aficionados que viajen a la final tengan menos tiempo para vivir el ambiente y disfrutar de las fan zone.